Por: Marlen Pérez.- Como si de encontrarse un cofre lleno de tesoros en el Golfo de Chiriquí, pero aun guardando miles de secretos por descubrir, se encuentra Boca Chica un pequeño pueblo pesquero ubicado a 64 kilómetros de la ciudad de David, capital de la provincia chiricana.
En este hermoso pueblo se abre un abanico de opciones para los turistas que lo visitan desde giras guiadas con guías de sitio, hasta paseos de relajación o avistamiento de cetáceos, por mencionar algunos.
Para los amantes de la pesca este es un tour imperdible, con tarifas accesibles donde podrán además de disfrutar el hermoso paisaje atrapan peces como pargo rojo, jurel y otros de gran tamaño como atún, pez dorado, macarela y muchos más.
Desde hace ,12 años Porfirio Villalobos conduce una lancha y se dedica al transporte de los turistas ya sea para visitar las islas cercanas o realizar cualquier otro tipo de tour de los que se ofrecen en este paradisiaco lugar.
Amante de la naturaleza y con alma aventurera explica que la mayoría de los visitantes que buscan estos recorridos son norteamericanos y que en gran parte desean pasar el día en alguna de las hermosas islas de boca chica y practicar snorkeling o buceo.
«Se cobra entre 20 a 25 dólares por persona si van a pasar el día en alguna isla o si buscan un viaje especial cómo realizar pesca por estero o pesca mar afuera«, explica el costeño, mientras preparaba su taxi nave para salir hacia mar abierto.
En Boca Chica son 35 lanchas taxis las que se dedican exclusivamente al transporte de personas de forma turística, debidamente reglamentadas por las autoridades competentes.
Organizados e instruidos por la Fundación MAR VIVA y la Autoridad Marítima Portuaria, Porfirio comenta, que han podido hacerle frente a la demanda de viajes a turistas de la mejor manera «manteniendo los permisos de navegación, revisado al día, extintores, radio, luces de bengala, chaleco salvavidas y demás» ofreciendo el mejor servicio a sus clientes.
Otra de las atracciones que más buscan tanto nacionales como extranjeros es visitar las incomparables Islas que forman parte del Parque Nacional Marino Golfo de Chiriquí, considerado Área Protegida y que enamora a todos los que llegan con sus cristalinas aguas y vegetación exuberante.
Las favoritas de los viajeros son Islas Paridas, Bolaños, Seca y Gámez; todas con una belleza robusta, donde las fuertes olas chocan con sus rocosas costas besando sus arenas ya sean blancas o grises.
Sus aguas azul turquesa y hermosos arrecifes de coral, son el gancho que atrae a los amantes del buceo y snorkeling quienes lo adorarán de principio a fin.
Muchos ríos desembocan en el mar de Boca Chica y ayudan a soportar un laberinto de manglares, lugar perfecto para divisar aves, reptiles y explorar en kayaks; el fascinante paraje que regala la costa chiricana de una forma divertida.
Paseo a caballo, senderismo, avistamiento de aves y uno de los más gustados: avistamiento de cetáceos; son otras de las opciones que los «Guías del pueblo» ofrecen a los turistas durante su estancia en este hermoso poblado.
Llegar a Boca Chica y no degustar su exquisita gastronomía sería un total error, ya que sus mariscos son considerados una verdadera delicia de los Dioses.
El corregimiento de Boca Chica está ubicado en el distrito de San Lorenzo y se encuentra a 19 kilómetros de la carretera Interamericana. Posee una población no mayor de 700 personas que se dedican en su mayoría a la pesca, artesanías y turismo.
Si lo suyo es la aventura, desconectarse de la cotidianidad, respirar aire puro o vivir experiencias inolvidables, visite Boca Chica; no sin antes tener en consideración que debe protegerse del incandescente sol, utilizar gafas, protector solar, gorra, ropa manga larga y mantenerse hidratado.
No comments